Decía uno de los AVENTUREROS: "quien nos vea en la carretera dirá ¡que ganas!" Efectivamente ya teniamos ganas de subirnos otra vez en nuestras bicis y dar un garbeo por ahí. Pero otra pregunta surge ¿Qué ha pasado?¿Cúal ha sido la transformación? Hace sólo unas semanas diría que un día como éste ni pensarlo, pero ahora...
Saliamos el primer martes de este año amenazando frío, amenazando lluvia y amenazando barro, y la convocatoria fué de cuatro, no está mal. Camino de Tibi, esquivando la lluvia, porque por allí estaba más claro. Hay que subir a la gasolinera del Maigmó porque allí está más claro. Allí empieza a llover. "Son cuatro gotas" dijo Noé. ¿Podemos comer aquí si pedimos una aceitunas y unas papas, señor camarero? dijimos en el bar de la gasolinera, "es que está lloviendo...". El camarero nos trae unas aceitunas y unas papas y nosotros nos comemos nuestros bocadillos. "Ah, y un bombón, por favor". "Oye que esto no para y si para las cuatro y media no ha parado nos vamos, está a punto de escampar".
Siguiendo la estela de agua que iban dejando las ruedas de las bicicletas fuimos avanzando por carretera hasta llegar a Castalla, "ya escampa", dijo alguien ¿Fué Noé?. Camino viejo de Castalla hasta Ibi y sin escampar. Qué ducha más calentita al final de la etapa, ¿Eh compañeros?. Por fín llegamos a nuestro lugar de partida con 48-49 km de más y 5-6 kg de más (el agua de los pantalones, de los mallots, de la mochila, y del sudor no evaporado por culpa de los chuvasqueros) Total: bicicletas limpias de barro acumulado en salidas anteriores (la bicicleta marrón de Takesi resultó ser roja), mojados por fuera por la lluvia y mojados por dentro del sudor.
Pdt. Los cuatro aventurero, nunca mejor dicho fueron: Oposició, Pau dixit, Takesi y Marmitaco.
Por cierto Oposición dice que es la última vez y Pau aguantó como un Jabato.
Recuerdos a todos los lectores del Blog, en especial a Suni.
Como no tenía fotos he puesto unas que me he encontrado por los rincones.