lunes, 31 de diciembre de 2007
Madrid, oh Madrid!
viernes, 28 de diciembre de 2007
Después de mucho tiempo...
Hola framiguitos: por fin lo he conseguido. Me he sentado frente al ordenador y me he propuesto al menos saludaros en estas fechas y desearos FELIZ NAVIDAD Y PRÓSPERO AÑO NUEVO 2008! Nunca me decidía a escribiros porque no participaba de vuestras andanzas por las tierras del ilustre hidalgo, de vuestras pérdidas gracias a..., de los cruces de ríos, de las suculentas comidas aquí y allá, de un tal (...) rosa, del Biscoi que se convierte en el Canalís por arte del birli-birloque, de los rodeos finales que como de costumbre os hace dar takesi.
Pero como veis he seguido atentamente todos los devenires de este grupo ESTUPENDO. Estoy ya desempolvando la bici para volver a pedalear hacia ningún sitio, siguiendo al incansable Memento Mori, escuchando los planes de salidas que nunca se harán, viendo cómo Josep tira del dedo de Carlinhos Brown y lo que sigue después, y no me enrollo más. Es decir, que para junio todo lo más reemprenderé la marcha ciclista.
En fin, sólo me queda desearos que lo paseis bien lo que queda de vacaciones y daros una gran noticia: ¡¡¡vamos a ser papás!!! Sí para mediados de agosto tendremos un hermanito para Toni. Tendré que controlarme o si no para el 2015 fundamos el ccestupendo jr...
miércoles, 26 de diciembre de 2007
ginesito x nyofles x takesi x ( 1 + marmitaco) = 2 eixides mercurianes
L'excursió del dia cinc va transcorrer per zones properes al riu fins arribar a la finca Terol. Camins amples entre pins alternaven amb pistes que s'intuïen en terrenys tous modelats capritxosament per l'aigua.Fins i tot aprofitàrem el llit del riu per a poder continuar la nostra etapa. Després d'un breu tram en carretera, trencàrem a la dreta per una senda travessera que directament ens duïa a la carretera de servei de l'autovia.Dinar en la capselera de la via verda d'Agost i café (pagà Ginesito amb el beneplàcit de Nyofles i la "gorroneria" de Takesi) en la gasolinera del Maigmó.La tornada pe la via de Castalla en constant conversa (ginesito no parà de xerrar). Una regressió a la nostra infantesa ens va fer gaudir d'unes voltes a un petit circuit de mini cross. La via d'Ibi (hem de recuperar-la!) fou la part final d'aquest itinerari.
L'excursió del dia dotze va transcorrer amb molt de fred. Pujàrem a la Carrasqueta per la carretera. Una ullada a la meravellosa vista que es divisa des dalt del port, va servir de preludi al dinar al migdia d'un mas. Després d'ascendir al refugi dels esbarzerets, on fins i tots els pets es fan visibles, mamprengueren el trepidant i perillós descens cap a la devesa. La gelor es va fer més intensa, el que donà un al·licient èpic a l'excursió. acompànyarem Marmitaco a sa casa, deixàrem Nyofles a la seua escola, Ginesito i jo retornàrem a l'institut. A l'aire va quedar el compromís d'una eixida durant les vacances...........
Noche de paz
Supongo que entre los muslos de pavo y el jamoncito y las gambas estaréis sacando tiempo para rodar y quemar calorías, ¿no? Yo volveré en enero, tenedlo por seguro, a quemar los kilos de más y a pasar frío por esas sierras perdidas donde aúllan los lobos y crecen a su antojo las zarzas...
Hasta entonces, sed buenos...
miércoles, 28 de noviembre de 2007
Resulta evidente que te has ido, muñeca (29,15 kms. de barro, piedras y frío polar)
Fue bonito mientras duró, todos nos sentimos reconfortados por su presencia, pero ahora Le Crayon nos ha abandonado, murió entre estertores de exámenes suspendidos con un 4 y empollonas repelentes que acabaron con sus ganas de vivir...
Ante semejante pérdida, los miembros los CCEstupendo pensaron en dejarse morir congelados en el monte para, cuarenta años después, ser recogidos del glaciar por sus propios hijos, de modo que estos, al contemplar a sus padres en un cubito de hielo con la misma edad que ellos tendrían en aquellos momentos, penetraran en una especie de bucle temporal inefable, una especie de situación borgiana donde el tiempo parece no pasar y donde nada es lo que parece, algo así como cuando Fracisco Sánchez se encuentra en un camino solitario con Francisco Sánchez, se observan cuidadosamente y se saludan, y entonces el universo parece no tener sentido...
Eso pensaron los miembros del CCEstupendo, pero fue sólo una idea que al final no prosperó, así que continuaron avanzando entre piedras y barro hasta terminar tomando el tradicional café en el Molina de turno.
De todos modos, los simpáticos y estupendos miembros del Club fueron acompañados, en esta ocasión, por el espíritu de Alpuente y los Kwai, el conocidísimo grupo ochentero que les deleitó todo el camino con su hit "Adiós, muñeca". Con semejante compañía Le Crayon no se echa tanto en falta, y las ganas de morir congelado ya no son tan grandes...
¿Y "mano negra"?, se preguntarán ustedes. Pues "mano negra" ha desaparecido misteriosamente, unos dicen que tenía la "bola malalta", otros dicen que no quiere volver a saber nada del CCEstupendo, pero hay quien jura haberle visto (a él en persona, o quizás a su espíritu juguetón), haciendo footing por los montes de Onil, apareciéndosele por las noches a las inocentes ardillas y haciendo huir a los lobos...
P.D.: Dicen las estadísticas que la ciudad más fría del mundo es Verhoyansk, en Siberia (Пишется "Верхоянск" по-русски. Это -красный город, я думаю), donde creo que se han registrado cincuenta y tantos grados bajo cero o algo así. Pero los científicos afirman eso porque no han estado comiendo en la cima del Biscoi...
jueves, 22 de noviembre de 2007
¡por fin! o las tribulaciones de un quimico en internet
Los bujarrones.. perdón, los nubarrones, amenazaban tormenta. A pesar de ello, los intrépidos aventureros decidieron salir a tentar la suerte: "¿Seremos más rápidos que las nubes?" "¿A qué huele el culot mojado?" " ¿Se habrá deshecho mi bocata de tortilla?" "¿Encontrarán los ausentes nuevas y mejoradas excusas para darnos esquinazo?" ..... preguntas todas de barra de bar de pueblo: trascendentes y de dificil solución. En fin, las nubes amenazaban tormenta, y nos avisaron con una leve llovizna que nos acompañó hasta bien entrada la vía hacia Castalla... la vía... esa ginkana difícil de creer, casi imposible por intrincada, ese franquenstein del escombro que cobra vida por semanas, si, la vía, la frontera entre el mundo conocido, el orden, y el caos absoluto de la dejadez. Por increíble que parezca, superamos de nuevo el reto, y la cruzamos sin perder ningún miembro, ninguno, ninguno.
Ya llegados a Onil, la lluvia amenazó de nuevo con frustrar nuestros planes de hacernos con "El Viscoy", y casi lo consigue. La retórica de Marmitaco, especialista en subir bajadas, convenció hasta a Takesi. No cambiaríamos la ruta.
A buen ritmo iniciamos la subida, larga y dura. Casi desfalllecidos por el hambre, llegamos al bar, perdón, al alto, donde paramos a comer. Como toda buena comida, la charla fue amena, la valla, los ecologistas, los alcaldes el xxxx amo de la valla, el xxxxxx del alcalde, el xxxxxx de la gente que se pasa tres pueblos, mi bocata de tortilla que, efectivamente, se ha deshecho... los placeres del gourmet de montaña.
El frío nos hizo retomar la ruta sin que a josep le diera tiempo a estirar del dedo a marmitaco. las revueltas mojadas y con el peso añadido de la información y el bocata en el cuerpo, y la curiiosidad por descubirr nuevos caminos nos hicieron entrar en una senda pedregosa que nos hizo bajar de la bici por momentos y que nos condujo a la ermita de san miguel, donde marmitaco nos conto que estuvo a punto de residir en su ladera, al lado del castillo. ya de vuelta en el pueblo los aventureros se fraccionaron deseandose
miércoles, 14 de noviembre de 2007
Por orden:
1.-nuestro destino marcado. No se transcribe lo que penso mano negra de este lugar.
2.-Los cinco intrépidos aventureros, guerreros de pecho de lata, como los romanos.
3.- Algunos guerreros ya no lo tienen claro y lo ven todo muy difuso.
4.-Mano negra y takesi "embarrancados" y "sin salida".
5.-Takesi preguntándose ¿Por qué y qué hacer?
cv.806. Km 12.
Una de detectives
- ¿Es usted "la mano negra"?
Silencio sepulcral.
- ¡Hable, maldita sea! ¿Es usted "la mano negra" que en la tarde del miércoles 14 de noviembre de 2007, sin nocturnidad pero con alevosía, le hizo la vida imposible a cinco estupendos excursionistas que sólo pretendían pasar una tarde de asueto?
Más silencio.
- Tenemos pruebas, ¿sabe? Uno de ellos le vio debajo de su culo, ralentizando la marcha; otro juraría que fue usted, "mano negra", quien le rompió la mochila y arrojó al suelo su camiseta; otro aseguraría que por su culpa Le Crayon se quedó en compañía de aquel tipo que parecía salido de "La matanza de Texas"; y todos, absolutamente todos, le culparían de colocar en el camino de vuelta a casa una poza de agua del tamaño de una fosa abisal. ¿Tiene algo que decir en su defensa?
"Mano negra" no despegó los labios, ni siquiera para solicitar la presencia de su abogado. ¿Y si fuera inocente? ¿Y si hubieran sido los traviesos duendes de los bosques quienes, dispuestos a reducir el inquebrantable ánimo de los excursionistas, hubieran decidido ponerles a prueba? Aquella sería una noche verdaderamente interminable...
domingo, 11 de noviembre de 2007
cv-803. km5 biscoi
miércoles, 7 de noviembre de 2007
Le Crayon y yo (30 kms.)
Le Crayon es fiel y decidido. Nosotros le decimos:
- Viens, Le crayon! Viens ici, avec nous!
Y Le Crayon obedece lleno de gozo. Luego lo llevamos con nosotros, él siempre nos sigue, y le hacemos subir el Canalís. Llega arrastrando la lengua por la carretera, como nosotros, esa lengua larga y sudorosa. Luego le hacemos bajar por sendas conocidas y redescubiertas, y se agita alegre cuando intuye el regreso a casa.
Él sabe que forma parte de nuestros corazones, dulce Le Crayon, y en estos momentos puede estar tanto aquí, conmigo, como con cualquiera de vosotros, incluso aunque estéis subiendo el Altet porque la etapa os haya sabido a poco.
¿No lo oís gorgotear a vuestro alrededor?
lunes, 5 de noviembre de 2007
"Tots Sants" o la rehabilitació de "Ginesito Rosa"
La primera part de l'excursió transcorria per paisatges molt humanitzats (cases de camp, carretera asfaltada, autovia) fins arribar a la impressionant (en tots sentits) presó de Villena. Per cert, corre el rumor segons el qual alguna deserció d'algun membre del club en aquesta eixida està relacionada amb la proximitat d'aquesta institució i la por a ingressar-hi.
A partir d'ací l'escenari canvià radicalment. Agafàrem una pista entre terrenys conreuats (precioses les carxofes) i immensos bancals erms. Sense adonar-nos, es vam endinsar en una serra amable (Serra del Morrón i Serra de Beneixama) que alternava pista amb senda ampla, corredors de tupida vegetació on destacaven els pins, peró també es mostraven bells i brillants els coscolls, brugueres, herbes aromàtiques i algun exemplar de savina ( no confondre amb el cantant ni en la del "boy, boy, boy"). El recorregut, a més, era variat, divertit i amb les seues gotetes de duresa (rampes no molt llargues que recordaven la grandesa d'aquest esport) i de risc (baixades compromeses on el nostre guia demostrava la seua habilitat i destresa). Tot acabava en una font propera a Fontanars dels Alforins on rematàvem amb tres quilòmetres i mig de pujada sobre asfalt i vuit de trepidant baixada (port del Moro) per a retrobar-nos amd el punt d'eixida. En total cinquanta quilòmetres d'armonia, de goig, on la inquietud del nostre guia, la ponderació de Josep i les ganes del que escriu, feren un matí extraordinari. Fins i tot Méteos es va sumar a la festa concedint un oratge que tardarem moltes "llunes" en correspondre.
A propòsit, la casualitat (o no?) va fer que ningú dels protagonistes (excepte el guia) de l'afamat conte "Ginesito Rosa y el Lobo" (tot un clàssic de la narrativa curta) estiguera en aquesta ruta de Beneixama. Però aquesta és una altra història....
miércoles, 24 de octubre de 2007
GINESITO ROSA Y EL LOBO
Miembro tipo del Grupo
viernes, 19 de octubre de 2007
renovar espiritu
Aquí están Santiago y Quijote en el mismo sitio, dos rutas unida en una. Qué mejor espíritu. Al lado de estas dos marcas deberíamos poner dos rayas blancas y amarillas e incluso roja del GPR7 que pasa por nuestras tierras o ruta 3 de la dipu alicantina por una vía verde imaginaria. Busquemos, queridos amiguitos, el símbolo que nos identifique para que su espíritu nos acompañe mientras viajamos por nuestros caminos y nos hable mientras pedaleamos en alguna vía verde de Teruel o Murcia (¿Eh, Pierres Papín?). En fin, caballeros guerreros de ex-calibour de la rueda redonda, ánimo y ¡¡al turrooon!!
Ya he encontrado algunas señales del espíritu (¿Qué será esa flecha verde?)
una altra vesprada en solitari, oh no?
Sortosament, l'esperit de Don Quijote (almenys així es va identificar) em va acompanyar durant l'excursió (magnífic Biscoi, reparador paratge de Santa Ana, actiu Castalla, estimat Ibi, desitjat Alcoi) i vam anar tota l'estona fent comentaris sobre el nostre grup. Em va cridar l'atenció dues observacions que un dels nostres personatges favorits va deixar caure: la primera que estava pensant-se molt seriosament suspendre cautelarment la concessió de la distinció de "cavallers de l'orde de la bicicleta", y en la segona observació ens animava a crear, modestament i salvant les distàncies, un món propi que tinguera com a escenari la nostra zona (¡bellíssima!), canviant bésties per màquines, la Mancha per la Muntanya i fantasia per realitat. Aquest últim comentari em va fer reflexionar i he arribat a una conclusió: aquesta aventura que fa mesos hem començat cada volta s'assembla més a una novel·la en la que els mateixos personatges van creant el relat.
miércoles, 17 de octubre de 2007
QUI ÉS QUI?
- Micocolembo (Pau dixit) ;
- Brandabarbarán (Takesi);
- Timonel (Marmitaco) ;
- Alfeñiquén (M Mori);
- Pierres Papín (Ginesito);
- Espartafilardo (Lance).
Crec que almenys en he acertat quatre. Ja ho sabrem si Marmitaco publica la solució o pel contrari ens convida a dinar.
Aquesta vesprada he estat en plan peripatètic visitant les fonts que han tornat a brollar per la falda de la Carrasqueta. Molt bònic i bucòlic. He fet per primera vegada unes fotos en la càmera per al vostre delecte, però el programa aquest no en deixa pujar-les. Una abraçada i fins el divendres a DINAR.
sábado, 13 de octubre de 2007
copiosísimo ejercito marmitaco
Después de la batalla y de hacer buena cuenta de los manjares y de libar el dulce líquido elemento. Como veréis no queda de nada, ni en los platos, ni en las jarras, ni en las botellas, ni en las copas,... solamente unos ojillos que lo dicen todo.
miércoles, 10 de octubre de 2007
En un lugar de la Mancha... (82 kms.)
- Sancho amigo, ¿qué es aquello que ven mis ojos? ¿No es, acaso, un horrible dragón de seis cabezas que se dirige raudo tal vez al secuestro de alguna dama descarriada? ¿Acaso no es deber de caballero acudir en ayuda de esta?
- Refrene sus ánimos, mi Señor, -gritó Sancho-, que aquello que sus ojos ven no es monstruo de seis cabezas ni existen ya damas descarriadas en los tiempos que corren, que aquello no son más que seis ciclistas del Grupo Estupendo que, tras una dura etapa, acuden a descansar sus miembros y hacer trabajar su estómago con una buena pitanza...
Aguzó el hidalgo antes conocido como Alonso Quijano la vista y exclamó, mostrándose decepcionado:
- Cuánta razón tienes nuevamente, Sancho, y con ello no haces más que confirmar mi acierto al hacerte mi escudero, pues no es dragón sino pelotón lo que ven mis ojos. Dejémosles pues avanzar, que el buen yantar no está reñido con la práctica deportiva, que hasta Ferrero (Juan Carlos) ha de recurrir de tanto en tanto a la ingestión de alimentos. Y sintámonos afortunados de tenerles en nuestras tierras, Sancho, que si Club Estupendo se hacen llamar, estupendos han de ser, y como tal hemos de tratarles.
Perdiéronse en el horizonte ambas figuras egregias, como se perdió el pelotón estupendo tras las puertas de la venta más próxima, que no era castillo pero provisto se encontraba de todo lo necesario para el disfrute y el deleite de los esforzados Caballeros de la Orden de la Bicicleta.
lunes, 8 de octubre de 2007
DEMÀ VAIG ACOMPANYAT
jueves, 4 de octubre de 2007
Una vesprada en solitari (per culpa d'una roda)
Aclarit aquest punt, us diré que vaig aprofitar la vesprada, fent una excursió per la Font Roja (dinant en la balconada del santuari creus que el temps s'ha aturat), baixant i pujant per la pista de les LLacunes (entranyable "Safranera"), i acabant als peus dels voltors (no hi vaig pujar per por a que alguna "béstia" se me'n duguera, anava mig mort). Aquesta vegada el déu de l'oratge regalà una tarda apacible. No volia guerrers, sino amables excursionistes. El que no va poder fer aquesta divinitat és convéncer a alguns de les bonances de l'exercici. He de reconéixer que es va millor acompanyat.
miércoles, 3 de octubre de 2007
El descanso del guerrero (0 kms.)
Dentro de seis días, si todo transcurre como debe, cantará otro gallo...
martes, 2 de octubre de 2007
La primera vegada
Marmitaco m´ha ensenyat com fer comentaris en aquest espai creatiu del qual tots estem gaudint. (ummmm...) Com totes les primeres voltes estic nerviós. Així que espere anar millorant la meua capacitat narrativa i de domini de aquest mitjà de relació. Res més. Salutacions a tots els bloguers troters.
lunes, 1 de octubre de 2007
jueves, 27 de septiembre de 2007
ALGUNAS MUESTRAS GRAFICAS
Jumping for all (52 kms.)
Y, sin embargo, siempre hay cosas que descubrir, como el acueducto romano o una ermita hasta ese momento desconocida, aunque ello haya costado un par de errores de orientación y algún que otro esfuerzo de más, o como un par de nuevos planes que alegrarán el fin de semana y prepararán el camino para la dura prueba que, si todo va como debe, nos espera la semana próxima...
martes, 25 de septiembre de 2007
viernes, 21 de septiembre de 2007
miércoles, 19 de septiembre de 2007
Contra el viento y la lluvia (45,8 kms.)
Cualquier espíritu temeroso habría desistido, habría guardado los bártulos para mejor ocasión y hubiera disfrutado de una agradable comida en algún restaurante cercano, protegido de las inclemencias exteriores, pero, ¿serían intrépidos estos aventureros si actuaran así?
La mejor manera de luchar contra elementos es enfrentándose a ellos, sin esquivarlos, que huir es de cobardes, habrá pues que dirigirse a la montaña, allá donde las cumbres están encapotadas hasta el punto de perderse entre neblinas y humedades, allá donde las nubes se agarran a la roca con la ansiedad con la que un náufrago sujeta la tabla que ha de mantenerle a flote, llegar tan cerca de la cima que el cielo pueda tocarse con yema de los dedos.
Allí habita el dios de las lluvias. Si llegas hasta él, cubierto de barro y sudor, si conquistas su reino como un valeroso guerrero, se arrodillará ante ti y te respetará durante el camino de vuelta.
El dulce regreso a casa, Dios, nunca una buena ducha fue tan necesaria...
miércoles, 12 de septiembre de 2007
La senda que surge a la izquierda de la curva (40,4 kms.)
Los caminos son conocidos pero parecen nuevos, cada día una experiencia cargada de sorpresas, dicen que sopla el nordeste pero es difícil de creer cuando el aire, vayas por donde vayas, no deja de golpearte el rostro.
Los kilómetros parecen más largos cuando se ha perdido la costumbre de devorarlos con fruición, seis kilómetros para comer, dicen, y los seis kilómetros se eternizan hasta convertirse en doce, alguien se inventa una senda que surge a la izquierda de una curva, más allá de donde debía encontrarse la legendaria lápida. Piedras y más piedras, moscas y más moscas, polvo y más polvo por vías agonizantes hasta llegar a la meta, un helado bajo una palmera, y comprobar que nada ha cambiado tanto y que, en el fondo, pedalear sigue siendo un placer.
P.D.: Cosas que hacer con 300 euros y pico:
· Comprar un GPS de última generación.
· Fin de semana en Ibiza.
· Comilonas (las que sean necesarias).
· Hacerse con unas botellas de whisky y consumirlas en cualquier esquina, cuanto más sórdida mejor.
· ¿Cuánta miel se puede conseguir con ese dinero? Seguro que tanta que sería posible llenar una bañera...
P.P.D.: Población de Brujas según las últimas estadísticas oficiales: 117.523 habitantes. Una megalópolis, vamos. Deben contar también los barrios periféricos...
domingo, 9 de septiembre de 2007
El dormilón
.- Día 10
Hay días que no existen, que se pierden en el olvido y la ensoñación, períodos de tiempo que juguetean entre la realidad y la ficción. Hoy es uno de esos días, y el viajero tiene la sensación de haber sido absorbido por un agujero negro.
Alguien le ha dicho que hubo de despertar temprano, muy temprano, más temprano de lo natural y saludable, y que a su alrededor la gente estallaba en gozos y festejos. Pero él no lo recuerda sino de forma vaga.
Alguien le ha dicho que el mundo se sumía en una niebla espesa e impenetrable, que era imposible ver más allá de las propias narices, que hasta los desayunos se perdían difuminados en humedad blanca. Pero él no tiene conciencia de ello.
Alguien le ha dicho que ha recorrido en unas horas más distancia que en toda la anterior semana, que han atravesado páramos interminables y llanuras abrasadoras, que han parado a decir adiós a los primeros tránsfugas, que han cantado, han oído músicas diversas, han vuelto atrás, pero el viajero sólo puede pensar en lo que ya ha sido, en lo que está a punto de terminar, en lo que quedará para siempre en el recuerdo.
Alguien le ha dicho que el día no ha terminado, que la noche todavía guarda sorpresas. Pero eso es otra historia.
El pianista
.- Día 9
Día extraño en la ciudad de los milagros. Cada rincón dibuja la escena de un cuadro de costumbres. Suena el Kyrie Eleison en la imponente Catedral, y un pueblo entero, bañado por el olor a incienso, entona sus himnos celestiales.
El viajero se adentra en el sótano, estrecho y asfixiante, y suplica por algún alimento que llevarse a la boca. En el casino, entre mobiliario decimonónico y olor a tabaco rancio, allí donde los hombres de negocios discuten cuánto tardaría un aventurero en dar la vuelta al mundo, el pianista improvisa un par de piezas ante un público selecto.
Tarde de fiesta. Calles atestadas. Charangas urbanas y una marea de rostros que se desplazan con paciencia de un lugar a otro, celebrando hechos tan trascendentes como la existencia de leche condensada en la barra de un bar, disfrutando de un chorrito de anís en una humeante taza de manzanilla.
Alguien lee el Marca en una mesilla, qué va a leer si no, si la lectura es cada vez más un privilegio por el que hay que luchar. Hasta las ovejas, que leen, montan en bici y buscan su porción de protagonismo en camisetas al por mayor.
Noche de miedo en la ciudad medieval. Arde la catedral, que cambia su figura por la de un castillo transilvano, el olor del incienso por el de la pólvora reciente. Luces, explosiones, figuras pirotécnicas y helicópteros como libélulas marcan el comienzo de unos días de locura y ponen el punto y final a la misión del viajero, que una vez más ha sido cumplida. En algún lugar crece la llama de la melancolía avivada por la proximidad del regreso.
La noche de los tapones
Tan sólo hay que cerrar los ojos y esperar el tiempo que tarda un suspiro en extinguirse. Sin más parafernalia, sin más pruebas que superar, sin tener que desearlo con fuerza, como sucede en los cuentos de hadas. No. Aquí todo es mucho más fácil, y cuando el viajero abre los ojos se encuentra con que ha llegado a su destino en un santiamén, y sus pies se afirman en aquella plaza que durante unos días ha sido el centro del mundo, el sancta sanctorum lejanísimo e inalcanzable, y entonces el viajero puede dejar de ser viajero por unas horas y convertirse en un visitante comodón y despistado, en un observador de planos y fotógrafo de rincones ocultos, en un sedentario paseante que, por primera vez en mucho tiempo, deja de caminar hacia delante para caminar en círculos y volver al mismo lugar del que partió.
La noche llega sin avisar y confunde los sentidos, y el viajero no sabe muy bien si sigue donde debe o se ha trasladado a Dortmund, todos parecen hablar alemán a su alrededor, tal vez todo ha sido un sueño, o una película, “La noche de los tapones” podría titularse, sin ir más lejos, la mejor manera de comprobarlo será impedir que la noche termine, alargarla hasta el infinito, salir de la gramola sin mirar el reloj y torcer la primera esquina de la que surjan ruidos, el ruido como señal vital, como prueba de vida, en realidad el viajero no ha hecho otra cosa durante su viaje, seguir los ruidos, las flechas, su instinto, a los otros, seguir y seguir hasta acabar delante de ese vaso de ginebra que tiene ahora frente a él, una ginebra tan amarga como la existencia.
¿Pero ya hemos llegado?
.- Día 7
El viajero disfruta de su soledad. No es que la busque pretendidamente, tampoco se ha propuesto huir de la compañía humana que se le aproxima circunstancialmente, pero el camino se alarga y el viajero se ha acostumbrado a avanzar con sus pensamientos como única compañía, por eso se sorprende cuando, a estas alturas de su trayecto, comprueba que no es el único, que otros viajeros comienzan a aparecer como brotados de la tierra, al girar tras una curva, al pasar una arboleda, descansando en una fuente. Por un lado, el viajero se siente reconfortado al observar cómo otros siguen sus pasos y los de aquellos que fueron antes que él; por otro, en cambio, comienza a preguntarse si realmente merece la pena buscarse a sí mismo entre una multitud de gente. En cualquier caso ya no queda mucho que hacer, el final del camino se encuentra allá, atravesando aquel bosque de helechos jurásicos, tras la última jornada de descanso.
La última posta, no obstante, es una prueba de resistencia, un refugio atómico centenario en edad y milenario en capacidad, un complejo monstruoso en el que para sobrevivir el viajero ha de soportar montones de enanos irreverentes gritando y agitándose como gnomos en celo, escuchar las historias de dipsómanos venidos del otro lado del océano, ignorar los rasgueos desacompasados de guitarras a deshora, hacer uso de sus artes en lenguas sajonas e incluso tontear con el mundo oriental, y todo bajo los litros y litros de agua traídos por una llovizna que se convirtió en tormenta y acabó en un huracán que arrasó con el monte que domina la ansiada meta.
Ave Maria, gratia plena, deus tecum, benedicta tu in mulieribus...
.- Día 6
Hablemos de la luna. La luna es un lugar inhóspito, despoblado, carente de seres humanos y con apenas vegetación. Su suelo es de piedra, piedra dura que se agarra al suelo con toda la fuerza de la soledad extrema, y fina arena sobre la que reverbera el sol. En la luna reinan las avispas, campan a sus anchas y se divierten revoloteando de un lugar a otro. El viajero lo sabe porque el viajero ha transitado por su superficie, la ha cruzado como quien cruza el desierto, con sólo un chorro de agua en la cantimplora y un plátano y una chocolatina como únicos alimentos.
Pero para recorrer la luna hace falta llegar hasta ella, y eso no es fácil, pues es necesario cumplimentar una infinidad de kilómetros, al menos ochenta, y sólo con una determinación tan marcada como la que posee el viajero se puede alcanzar satisfactoriamente el objetivo. Antes será necesario enfrentarse a mariposas kamikaze, ingerir mosquitos al pie de iglesias románicas, evitar el abrazo estremecedor de las zarzas que agarran con la pasión del amante celoso.
¿Y qué hay más allá de la luna? Un montón de tipos cargados con mochilas que caminan renqueantes, se fríen unas patatas en cualquier lugar y ofrecen una taza de té tan reconfortante y gratuita como inexistente, y que, para colmo de desdichas del sufrido y desafortunado viajero, se retiran a sus aposentos antes incluso de que caiga el sol, sin tener la posibilidad de comprobar el tintineo de las farolas decadentes o la caída a plomo de las enormes puertas que les dejarán encerrados durante unas horas.
Atasco de camiones
.- Día 5
Qué rápido va el mundo cuando no caminas. Sin el paso a paso, sin el poco a poco del esfuerzo continuado, la tierra gira a mayor velocidad y los kilómetros se consumen sin que el viajero se aperciba de ello. Uno tendría la sensación, al comprobar que el tiempo transcurre de forma diferente, de que si la vida fuera un territorio por caminar, y si cada uno fuera para siempre el viajero que sólo es en momentos contados, el estar vivo tendría verdadero sentido.
Pero hoy no, porque hoy los pueblos aparecen y desaparecen en un suspiro, y las curvas se toman sin casi pretenderlo, y los desniveles del terreno han dejado de ser un supremo desafío para convertirse en un sencillo juego de niños que provoca risa.
Y entonces nada es tan importante, y el viajero pasa por catedrales, monasterios y montañas abruptas sin necesidad de jadear, sin que le falte el aliento, si que cada metro ganado sea una conquista titánica, pero algo falta, algo que el viajero decidió hacer para comprender quién era en realidad, y sólo queda esperar al día siguiente, observar pacientemente al paso de las horas en una casa de piedra en el fin del mundo, arreglar los frenos que no precisa para avanzar sin descanso, construir un imposible mundo mejor al abrigo de una queimada improvisada y robarle al sueño las horas que su cuerpo, cada vez más consumido, reclamará con inútil firmeza tras el siguiente canto del gallo.
Nunca costó tanto llegar a O Estofado
.- Día 4
Hoy sí. Hoy el camino es el camino, y se estrecha y se retuerce, y se pierde y se reencuentra, y gira sobre sí mismo en arabescos imposibles.
El mar, sin embargo, no es el mar, porque el mar no vuela, y hoy el mar estaba en el cielo, y allí seguiría si no hubiera decidido desplomarse de golpe sobre el viajero en forma de gruesas gotas de agua que anegaban la senda, sus alrededores, el aire, al viajero y a su alma. Ahora ya el viajero sabe lo que es avanzar por el fondo oceánico. El fondo oceánico es húmedo y brumoso, y está poblado de babosas y caracoles que treparían por sus piernas si esta detuviera su marcha.
Afortunadamente esta marcha no se detiene. Una multitud de flechas amarillas señalan el camino y se clavan en el desánimo del viajero, haciéndolo añicos y dándole fuerzas para continuar bajo el pesado manto de agua, y apetecería unir todas esas flechas y crear con ellas una sola, de una longitud tal que fuera posible, disparando con el arco apropiado, alcanzar el cielo, herirle los ojos y lograr así que, de una vez, deje de llorar para que el viajero cruce los puentes, atraviese las playas, suba los montes y escarbe en el heno que sea necesario hasta llegar a su objetivo, que no es otro que observar la interminable puesta de sol en el lugar más tranquilo del mundo, aquel donde hasta los colchones llevan chubasquero, aquel donde, aparte del propio viajero, sólo reinan las arañas.
Sigue el camino de baldosas amarillas
.- Día 3
El viajero no es Sísifo, pero podría serlo. Sólo tendría que cambiar de nombre. De condena, no. La condena la padece cada vez que ha de ascender a las cumbres más altas, arrastrando su carga particular, que no es una enorme piedra pero podría serlo, para luego volver a bajar porque sí, porque le toca sufrir, porque algún Dios rencoroso ha cruzado en su camino las pistas falsas necesarias para confundir sus sentidos y su ruta. Pocas distancias son tan excesivas, y tan cansadas, como las que son inútiles.
Cualquier espíritu inconstante se preguntaría el porqué. El porqué de la distancia, del avance, de todo aquel caos incontrolable, del dolor que comienza a circular por sus músculos con tanta naturalidad como la sangre por sus venas.
Pero el camino devuelve todo lo que tomas prestado. Lo transforma, lo recicle y lo entrega como cúmulo de sensaciones. El camino comienza a tomar forma. A trozos, parcialmente, como el martillo y el cincel dibujan los contornos de la belleza sobre el mármol del escultor. El camino comienza a parecerse a la imagen que de él siempre soñó el viajero. Los sueños comienzan a fundirse con la realidad en forma de estrechez, de pequeños puentes, de dosis controladas de aventura. Y no hay nada, nada, que motive más al ser humano que la posibilidad de ver cumplidos sus sueños.
Mira, tía p..., en el suelo va a dormir tu p... madre
.- Día 2
La peor pesadilla puede perfectamente ser algo así como comer caviar en mal estado. El viajero se ve a sí mismo transitando por un paisaje de ensueño, un vergel paradisíaco digno de ser morada de las divinidades. Los riachuelos fluyen por doquier entonando dulces canciones de amor y amistad, la vegetación le cubre de un verde exuberante, el mar le sigue de lejos, a veces oculto, a veces asomando furtivamente como un espía incompetente.
Y sin embargo el paraíso esconde sus secretos en vericuetos retorcidos, en callejones sin salida, en monstruos que, resoplando bocanadas de humo, pretenden sacarle del camino que él mismo, en un arranque de soberbia y amor propio, se ha marcado como único y verdadero.
El viajero lucha contra el viento en viaductos inverosímiles, se agarra a anclas de museo como al último clavo ardiendo, alza manos para tratar de atrapar una gaviota que le transporte al país del sueño eterno, pero es inútil, las gaviotas se transforman en Ícaros irresponsables cuyas alas se derriten como las ilusiones de un condenado, yonquis kafkianos sellan los caminos que la lógica designaría como preferibles y, cuando por fin el viajero parece poder descansar en paz, ha de hacerlo sobre el duro suelo polvoriento, cenizas a las cenizas y polvo al polvo, como un cadáver, si los cadáveres tienen pesadillas. Caviar en mal estado.
Diario de una fraventura
.- Día 1
Si el viajero tuviera que plasmar en un lienzo su primer día de camino, acudiría a su paleta y mezclaría marrones y amarillos hasta obtener un ocre quemado, el ocre de la tierra tostada por el sol. Bañaría su mundo en ese color y lanzaría, aquí y allá, en un azar ordenado, pinceladas de un verde oscuro que moteara colinas lejanas, sierras que se levantaran a un lado y a otro y que, haciéndole pasillo, le rindieran honores.
La senda sería recta, eterna como un doloroso via crucis, pero bella al mimo tiempo, con la belleza que se refleja, a destellos, en los rostros que sufren.
El mundo daría vueltas, provocando un ligero y desagradable mareo que acompañaría al viajero como un parásito inclemente y que sólo sería soportable, mientras quedan atrás puentes sobre ríos ficticios, torres de iglesias deshabitadas y cielos cada vez más grises, por la perspectiva de unos minutos de reposo y de unos días, los próximos, cargados de emociones.
ESTATUTS
PRINCIPIS I DECLARACIÓ D´INTENCIONS:
·El primer mai serà el més fort ni el més bonic, sino sòls qui arriva abans. (En tot cas és el més virgueret i qui es perd la conversa interessant del pilot).
·Aquell que sempre vaja l´últim mai serà el més feble ni el més "pardal", només qui aplega després. (En tot cas és el qui més relacions sentimentals ha tingut la nit abans i qui ara es perd la interessant conversa del pilot).
·Qui per una excusa no creïble deixe d´anar a una excursió, pagarà el café a la resta de companys en la següent convocatòria, sempre que hi assistisca algun membre.
·No s´admetran com a excuses creïbles: que ploga a bots i barrals, 41º de febre, constipat monumental o similars malalties, compromissos familiars o conjugals, no disposar de bici, i d´altres.
DRETS:
1. Tots els membres tenen dret:
·A una bicicleta que no es trenque.
·A beneficiar-se del café de multa imposat en cada convocatòria, sempre que hi assistisca a la següent.
·A gaudir del paisatge durant el camí i, sobretot, a les acaballes de l'itinerari.
·A baixar-se de la bici quan estiga cansat en qualsevol circumstància. Igualment, poden acabar en última posició, si és el seu desig.
·A una bac i trencament de parts del cos. Ans del bac s'ha de pensar en els companys que han de fer la guàrdia durant la baixa.
·A portar un telèfon mòbil (les condicions s'especificaran a l'apartat dels deures).
DEURES:
·Mantindre la bicicleta en bon estat.
·Pagar el café de multa.
·Callar i dissimular si no li agrada la ruta.
·Esperar als companys endarrerits (fins i tot si es tracta de Lance).
·Esforçar-se per no endarrerir, sense justificació, la marxa del grup.
·Dur el mòbil apagat (es faran parades tècniques per a comprovar l'agenda i fer el preceptiu control "antidoping").
·En cas de bac, no demanar la baixa si no és estrictament necessari.
DISPOSICIÓ FINAL:
En aquest club (estupendo) els membres no tindran cap deure (i menys per a casa). Per tant queden anul·lats tots els articles anteriors (ja, ja).